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“Estamos dando este paso para impedir que Maduro tenga acceso al sistema financiero global y para aislarlo aún más internacionalmente”, dijo Bolton. “Además, estamos enviando una señal a terceros que quieren hacer negocios con el régimen de Maduro: Procedan con extrema precaución. No hay necesidad de arriesgar sus intereses de negocios en Estados Unidos con el fin de lucrar con un régimen corrupto y moribundo”.

La oficina de Prensa de la Casa Blanca reiteró el martes por la mañana que “como la administración de Trump ha dejado en claro: todas las opciones están sobre la mesa”.

“Estados Unidos usará todas las herramientas apropiadas para poner fin al control de Maduro sobre Venezuela, apoyar el acceso del pueblo venezolano a la asistencia humanitaria y garantizar una transición democrática en Venezuela”, agrega el comunicado.

El gobierno de Maduro respondió diciendo que el nuevo embargo era un acto de “terrorismo económico”.

“Washington ha emitido otra Orden Ejecutiva que pretende formalizar el criminal bloqueo económico, financiero y comercial ya en marcha, que ha ocasionado severas heridas en la sociedad venezolana durante los últimos años, y cuyo único objetivo es el de ahorcar al pueblo venezolano para forzar un cambio de gobierno inconstitucional en el país”, dijo el Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores controlado por Maduro.

 

Adelantándose a las críticas, Bolton dijo en Lima que “este bloqueo no es contra el pueblo de Venezuela sino contra el régimen de Maduro. Estados Unidos ha tomado medidas cuidadosas para salvaguardar el acceso del pueblo venezolano a la ayuda humanitaria y necesidades básicas”.

La orden ejecutiva contempla excepciones para el suministro de alimentos, ropa y medicinas. Bolton aclaró que Estados Unidos autorizará la entrega de ayuda humanitaria, las actividades de organizaciones internacionales y no gubernamentales así como el correo postal, las telecomunicaciones y el acceso a internet.

El Departamento del Tesoro dijo que el envío de remesas personales no comerciales también estaría permitido y aclaró que “las sanciones no prohíben que personas estadounidenses participen en transacciones con el país o el pueblo de Venezuela, siempre que no participen las personas que han sido bloqueadas ni que se realicen conductas proscritas”.

Estados Unidos fue el primer país en reconocer al presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como presidente interino de Venezuela en enero. Desde entonces, recordó Bolton, el gobierno de Trump ha emitido sanciones contra más de 100 personas y entidades que han servido “de salvavidas” a Maduro, incluidas PDVSA, el Banco Central de Venezuela y varias agencias de seguridad.

Estados Unidos también ha revocado más de 700 visas, entre ellas 100 a diplomáticos del gobierno de Maduro. Pero este aún mantiene el control de las fuerzas armadas y aparatos del estado, con el apoyo de Cuba, Rusia y China.

Bolton dejó claro que la paciencia de Estados Unidos con el proceso de diálogo entre representantes de Maduro y de la oposición —organizado por Noruega con el apoyo de la Unión Europea— se había agotado.

A Maduro se les está “acabando la cuerda”, dijo.

“Vemos a Maduro usando sus mismas viejas tácticas, pretendiendo estar interesado en un diálogo, cuando todos sabemos que solo está comprando tiempo. No vamos a caer en estos viejos trucos de un dictador cansado”, señaló el asesor estadounidense. “Se acabó el tiempo para el diálogo. Ahora es el momento para la acción”.

En una conferencia de prensa con periodistas el martes, Guaidó dijo que el diálogo mediado por Noruega continuará. Las conversaciones, las sanciones, la presión en las calles “son parte de la misma estrategia para encontrar una solución a la crisis, que es lo que todos queremos”.

Cuando se le preguntó sobre la diferencia entre el embargo a Cuba y las sanciones anunciadas por la administración Trump, dijo que estas no incluyen “un embargo a todo el país. Las compañías privadas aún pueden comprar alimentos, medicinas y suministros. Incluso el régimen usurpador puede comprar alimentos y medicamentos, pero no lo hará porque está muy endeudado “.

Bajo el embargo de Cuba, las compañías cubanas aún pueden comprar alimentos y medicinas en los Estados Unidos, pero los vendedores deben recibir autorización previa.

El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel dijo en Twitter que el “bloqueo de los activos venezolanos es un despojo, un robo, un ensañamiento brutal que no podemos permitir”.

En su discurso en la mañana, Bolton aprovechó también para lanzar otra advertencia a los países aliados de Maduro.

“Tanto a Rusia como a China, les decimos que su apoyo al régimen de Maduro es intolerable”, dijo Bolton. “Decimos nuevamente a Rusia, y especialmente a quienes controlan sus finanzas: ‘No sigan insistiendo’. A China, que ya está desesperada por recuperar sus pérdidas financieras, la ruta más rápida para recuperar su dinero es apoyar un nuevo gobierno legítimo”.

Bolton volvió a acusar a las fuerzas de inteligencia y seguridad cubanas en Venezuela de ser “el eje central del apoyo externo a este dictador. Estados Unidos está tomando medidas para romper los lazos entre Venezuela y Cuba. Nuestras sanciones contra embarcaciones que transportan petróleo entre los dos países son solo el comienzo”.

A Maduro, Bolton le lanzó una última advertencia: Guaidó es intocable.

“Le hemos dejado claro a Maduro, a los rusos y a los cubanos que no deben hacer nada para poner en peligro a más civiles inocentes, ni deben tomar represalias contra Juan Guaidó”.

Michael Wilner, corresponsal de McClatchy DC, y Jim Wyss, corresponsal del Miami Herald, contribuyeron a este reportaje.

 

Fuente: https://www.elnuevoherald.com/noticias/mundo/america-latina/venezuela-es/article233568027.html